El mayor museo de la cultura minoica.
Este museo de la capital de la isla de Creta, es uno de los más importantes de Grecia, y por supuesto el mejor en cuanto a cultura minoica se refiere. Los tesoros encontrados en Malia, Knossos, Festos y otros yacimientos se exponen aquí.
Se encuentra situado en pleno centro de Heraklion y los autobuses que circulan desde el puerto hacia el yacimiento de Knossos tienen una parada junto al Museo.
Datos prácticos.
Precio 10 Euros. 5 reducida, (ciudadanos de la UE, estudiantes de fuera de la UE mayores de 65) gratis estudiantes de la UE
Horario
Invierno: De 1 de Noviembre a 31 Marzo
Lunes 11:00 a 17:00
Martes a Domingo y festivos: 8:00 a 15:00
Verano: De 1 de Abril a 31 Octubre
Lunes 8:00 a 20:00
Martes a Domingo y festivos: 8:00 a 20:00
Precio 10 Euros. 5 reducida, (ciudadanos de la UE, estudiantes de fuera de la UE mayores de 65) gratis estudiantes de la UE
Horario
Invierno: De 1 de Noviembre a 31 Marzo
Lunes 11:00 a 17:00
Martes a Domingo y festivos: 8:00 a 15:00
Verano: De 1 de Abril a 31 Octubre
Lunes 8:00 a 20:00
Martes a Domingo y festivos: 8:00 a 20:00
El Museo de Heraklión consta de veinte salas de las cuales una se dedica al Neolítico, trece, es decir, más de la mitad del museo desarrollan diferentes periodos y estilos de la cultura minoica, incluyendo tres salas dedicadas a los frescos minoicos.
Dorios y la cultura de Micenas tiene sus respectivas salas, siendo el resto arte griego y romano clásico.
En este recorrido fugaz nos detendremos en algunas de las piezas más significativas. Los son todas las que están, pero no están todas las que los son. (que son muchas).
La Cerámica de Kamarés.
Entre las piezas más antiguas de la civilización minoica están las cerámicas conocidas como de Kamarés y que sus piezas más antiguas son del 2100 a.C. algunas son anteriores a la introducción del torno y llamadas proto-Kamarés. Posteriormente en la etapa de los primeros palacios aparecen las primeras cerámicas policromas.
Sus rasgos más usuales son los motivos geométricos, florales, de tipo vegetal y animales, predominando los rojos, blanco y azules sobre negro. La tipología abarca copas, jarras con pitorro y las muy populares pithoi grandes jarras de almacenamiento con motivos marinos y vegetales.
Las salas II y III albergan numerosos ejemplos de cerámica junto con otros objetos del periodo de los primeros palacios como las pequeñas maquetas de arcilla de viviendas y una moderna maqueta del Palacio de Knossos.
En la Sala III se encuentra una de las piezas clave del Museo.
El Disco de Festo.
La piedra roseta de la cultura minoica, descubierto en una pequeña habitación del Palacio de Festo, procede del inicio del periodo Neopalacial y su estado de conservación es casi perfecto.
Tiene sus signos impresos en espiral a ambos lados del Disco, haciendo una espiral desde el borde hasta el centro. En total se emplean cuarenta y cinco signos diferentes que se agrupan formando palabras. Estos signos fueron impresos mediante el uso de sellos lo que le convierte en el primer uso de tipografía conocido. A pesar de todo, a día de hoy la lengua minoica no ha conseguido ser descifrada.
El Fresco del Minotauro.
Puede que a este fresco se le considere no solo la base iconográfica del mito de Teseo y el Minotauro sino la prueba del origen cretense de la tauromaquia y las celebraciones de esta naturaleza que recorrieron el mundo mediterráneo.
La escena es un salto de toro en la que participan dos mujeres, y un hombre de tez oscura. Una mujer frente al toro cumple la misión de reducir la velocidad del animal para que el hombre ejecute un salto acrobático mientras la otra mujer espera al saltador con los brazos abiertos. El fresco procede de Knossos.
El Rython y las diosas de la Serpiente.
La Sala IV contiene dos de los más conocidos objetos del museo.
Las Diosas de la Serpiente, objeto de culto encontrado en Knossos y correspondiente al periodo Neopalacial entre 1650-1550 a.C.
En la figura más grande las serpientes se enrollan al cuerpo y los brazos mientras que la más pequeña sostiene dos reptiles en sus manos mientra que s0obre su cabeza hay un felino. Sus grandes pechos sugieren alusiones de fertilidad y sus trajes son de grandes faldas con volantes.
El Rhyton de piedra luce esplendido en parte porque el lado izquierdo de la cabeza y los cuernos han sido objeto de restauración. A pesar de ello es sin duda una obra maestra del arte minoico con un gran naturalismo. El hocico blanco es hecho con concha marina y los ojos con cristal de roca y el iris con jaspe rojo. Era un objeto sagrado para realizar libaciones.
Cabezas minoicas de toros.
Otras de las figuras más llamativas son las figuras de arcilla con diosas que levantan sus brazos y están tocadas con pájaros en el sombrero y cuernos de consagración. Destaca el de un hombre llevando un carro de bueyes.
Muy destacables es el modelo circular de un edificio, seguramente un santuario o tumba. Esta pieza es ya del periodo post palacial pero conserva los elementos iconográficos propios del periodo minoico.
Podemos ver la puerta como una pieza separada y en el interior una deidad femenina con los brazos levantados y sombrero, rasgo claramente minoico. Está sentada en un trono, y en el techo del edificio hay dos figuras humanas que observan a la deidad a través de un tragaluz y junto a ellas un perro. El santuario está decorado con motivos geométricos y espirales. Esta representación data del 900 a.C.
Antes de pasar a los famosos frescos minoicos, una de las piezas más importantes del museo.
El sarcófago de Hagia Triada
Es un gran sarcófago de piedra con representaciones de ceremonias en honor de los muertos y alusiones a la vida eterna. El sarcófago está pintado al fresco. Todo parece indicar que fue para honrar a un poderoso hombre local que gozo de un esplendido funeral. Su datación procede del 1370-1300 a.C.
Los frescos minoicos.
Si ya has visitado Knossos cuando veas los frescos del Museo de Heraklion entenderás que Evans y compañía completaron e imaginaron muchos de sus frescos restaurados. Y es que tres mil setecientos años no es ninguna broma. Que nadie espere ver lienzos completos.
En estas salas se ha tomado la decisión de pintar lo que se cree que fue el fresco completo pero siempre dejando claro que es lo real.
Algunos de los mas famosos frescos son:
El «Príncipe de los lirios»
De los frescos más conocidos, formaba parte de una gran composición mural. Es una figura de tamaño real con una rica falda decorada, cinturón y una soberbia corona con lirios y plumas de pavo real. Evans afirmaba que este era el sumo sacerdote-rey de Knossos. Otras teorías afirman que se trata de un boxeador o atleta. Corresponde con el periodo Neopalacial.
La Parisien o dama minoica.
Otro de los más conocidos frescos de Knossos y con un fragmento conservado bastante grande. Su tocado en la nuca identifica a esta mujer como sacerdotisa. Parece que las grandes damas minoicas usaban con profusión el maquillaje, el negro en los ojos y el rojo en los labios.
Es un fresco de 1450-1300 a.C. finales del periodo Neopalacial
El mundo clásico.
Tras los frescos minoicos se abordan las salas con restos micenicos, dorios, griegos, helenísticos y romanos.
Sarcofago helenístico de mármol con una tapa muy trabajada. Luce una guirnalda floral sujetada por Eros. Luce dos cabezas de medusa coronadas con alas y serpientes. Este sarcófago del siglo tercero antes de Cristo fue encontrado en una basílica cristiana de Malia.
Muy destacable es la escultura romana con fuerte influencia helénica que representa a Plutón y Perséfone una de las más famosas historias de la Metamorfosis de Ovidio.
Perséfone fue raptada por el horrible Plutón que habia sido víctima de las flechas de Cupido y como consecuencia la madre de Perséfone, Deméter, vago desconsoladamente provocando la sequía y la hambruna pues Deméter es la diosa de la naturaleza y la que enseño la agricultura a los hombres.
Zeus intervino y pidió a Hades (Plutón romano) que dejara volver a Perséfone de los infiernos. Este accedió pero hizo que Perséfone tomara seis semillas de granada, símbolo de la fidelidad conyugal por lo que Perséfone tendría que pasar seis meses al año en el inframundo. Y volvía a la tierra como todos suponemos, en Primavera, para regocijo de Deméter que provocaba el florecimiento de la naturaleza.
Perséfone y Hades son la Proserpina y Plutón romanos, pero también son un trasunto de las deidades egipcias Isis y Serapis. Plutón tiene en su cabeza el utensilio para medir el grano, (medir almas). Por su parte Persefone tiene un disco solar con una luna creciente y probablemente sujetaba al cancerbero. Esta composición aúna tradición egipcia con la helenística y la romana. La escultura es de mediados del siglo II d.C.
Museo de Heraklión, una sabia mirada hacia el pasado
Hermoso recorrido! muy completa la información
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